Queridos amigos
Con el permiso de David y Mia transcribo esta carta que me envio y que me perece que contiene una magnifica iniciativa.
Espero que sea motivo de discusion por este medio y a ver si la hacemos realidad.
Atte
Marcos
Estimado Marcos.
Primero permite saludarte y a la vez darte mis más sentidas condolencias por el abrupto fallecimiento de tu señora madre, soy compañero de trabajo de Diego, tu hermano y tuve tu referencia gracias al artículo que escribiste respecto al accidente, que Diego nos hizo llegar después del entierro.
Bueno, permíteme contarte el motivo de mi correo, disculpa si me explayo demasiado: Hace un tiempo, estuve viajando con frecuencia al Ecuador por motivos de trabajo, en uno de mis viajes, me tope con un dibujo de un corazón azul en plena pista, me pareció algo raro y a primera impresión pensé que se trataba de alguna propaganda, algún centro comercial invadiendo las pistas con su publicidad. Pero, coincidentemente en la noche, estando en el Hotel, me tope con la explicación, se trataba de una campaña de concientización que tenía el Ministerio de Transporte de Ecuador tomando como modelo algunas campañas internaciones de lucha por la paz o contra la violencia racial.
Resulta que el “corazón azul” pintado en el suelo es el recordatorio de que en dicho lugar falleció una persona a causa de un accidente de tránsito. Cada vez que la gente pasa y se topa con uno de estos dibujos, aunque no conoció a la persona siente algo que se espera ayude a crear conciencia, es como dejar la mancha de sangre en forma permanente y decir aquí murió……
Pienso que nuestro cerebro es muy susceptible a la muerte, y parece que siempre queremos sentirla muy lejos, tanto que terminamos muy confiados de que no nos pasará a nosotros y bajamos la guardia. Ahora bien, Me parece que el éxito de esta campaña radica en que con el solo hecho de transitar por la calle recibimos ciertos inputs visuales hacia nuestro cerebro de nuestra realidad, de esa jungla que debemos atravesar muy atentos y las consecuencias fatales que a otros les ha costado.
Bueno, el contarte esto, es porque, con Mía, mi hija, después que le conté, estuvimos pensando en poder motivar a la gente a hacer algo parecido acá en Perú, no sé si exista algo como tal y allí el especialista es Ud., pero creo que ideas como esta, bastante simples, son buenas copiarlas y buscar poder poner un granito de arena para parar cuanto podamos las muertes en las calles.
Ahora en diciembre paso lo de tu madre y también un primo hermano de mi esposa de 28 años murió a causa de un accidente de tránsito en el norte, así que nuevamente salió el tema de conversación con mi hija y decidimos ver como empezar, por lo que se me ocurrió escribirte y contarte la idea, como especialista en el tema, conocer tu opinión y creo que desde tu posición podría tener mayor alcance.
Bueno Marcos, se lo atareado que debes estar, igual gracias por el artículo que escribiste y gracias de anticipado también por la atención a la presente.
Nuevamente nuestras más sentidas condolencias.
Saludos
David Sandoval, Mía Valeria
Teléfono 993232809 / Oficina: 7106129
Con el permiso de David y Mia transcribo esta carta que me envio y que me perece que contiene una magnifica iniciativa.
Espero que sea motivo de discusion por este medio y a ver si la hacemos realidad.
Atte
Marcos
Estimado Marcos.
Primero permite saludarte y a la vez darte mis más sentidas condolencias por el abrupto fallecimiento de tu señora madre, soy compañero de trabajo de Diego, tu hermano y tuve tu referencia gracias al artículo que escribiste respecto al accidente, que Diego nos hizo llegar después del entierro.
Bueno, permíteme contarte el motivo de mi correo, disculpa si me explayo demasiado: Hace un tiempo, estuve viajando con frecuencia al Ecuador por motivos de trabajo, en uno de mis viajes, me tope con un dibujo de un corazón azul en plena pista, me pareció algo raro y a primera impresión pensé que se trataba de alguna propaganda, algún centro comercial invadiendo las pistas con su publicidad. Pero, coincidentemente en la noche, estando en el Hotel, me tope con la explicación, se trataba de una campaña de concientización que tenía el Ministerio de Transporte de Ecuador tomando como modelo algunas campañas internaciones de lucha por la paz o contra la violencia racial.
Resulta que el “corazón azul” pintado en el suelo es el recordatorio de que en dicho lugar falleció una persona a causa de un accidente de tránsito. Cada vez que la gente pasa y se topa con uno de estos dibujos, aunque no conoció a la persona siente algo que se espera ayude a crear conciencia, es como dejar la mancha de sangre en forma permanente y decir aquí murió……
Pienso que nuestro cerebro es muy susceptible a la muerte, y parece que siempre queremos sentirla muy lejos, tanto que terminamos muy confiados de que no nos pasará a nosotros y bajamos la guardia. Ahora bien, Me parece que el éxito de esta campaña radica en que con el solo hecho de transitar por la calle recibimos ciertos inputs visuales hacia nuestro cerebro de nuestra realidad, de esa jungla que debemos atravesar muy atentos y las consecuencias fatales que a otros les ha costado.
Bueno, el contarte esto, es porque, con Mía, mi hija, después que le conté, estuvimos pensando en poder motivar a la gente a hacer algo parecido acá en Perú, no sé si exista algo como tal y allí el especialista es Ud., pero creo que ideas como esta, bastante simples, son buenas copiarlas y buscar poder poner un granito de arena para parar cuanto podamos las muertes en las calles.
Ahora en diciembre paso lo de tu madre y también un primo hermano de mi esposa de 28 años murió a causa de un accidente de tránsito en el norte, así que nuevamente salió el tema de conversación con mi hija y decidimos ver como empezar, por lo que se me ocurrió escribirte y contarte la idea, como especialista en el tema, conocer tu opinión y creo que desde tu posición podría tener mayor alcance.
Bueno Marcos, se lo atareado que debes estar, igual gracias por el artículo que escribiste y gracias de anticipado también por la atención a la presente.
Nuevamente nuestras más sentidas condolencias.
Saludos
David Sandoval, Mía Valeria
Teléfono 993232809 / Oficina: 7106129
